Con dobles sesiones, mucha carga de trabajo y un montón de ilusión han culminado los entrenamientos del Cádiz CF en esta primera semana tras el parón veraniego. El equipo de Sergio González trabaja ya con las dos nuevas incorporaciones, Awer Mabil y Víctor Chust pero a la espera aún de salidas y llegadas que tendrán que esperar.
Con el balón siempre presente pero las cargas habituales de pretemporada, el Cádiz culmina la primera semana de las seis habituales que todo equipo de fútbol tiene antes del debut liguero. El equipo amarillo debutará en el Nuevo Mirandilla el 14 de agosto ante la Real Sociedad y el objetivo no es otro que el de llegar en un estado de forma óptimo pero siempre consciente de que la temporada es larga y será complicada.
Una pretemporada distinta por el Mundial
La intención de todo equipo, parece que también del Cádiz, es la de una puesta a punto diferente a la de temporadas normales. El parón invernal a causa del Mundial de Qatar dará la opción a equipos como el cadista de contar con otra mini pretemporada en los dos últimos meses del año. Esta situación puede provocar que las cargas de verano, el trabajo físico sea distinto. Puede ir enfocado y dirigido a afrontar con el máximo rendimiento físico esos primeros cuatro meses de campeonato.
La sesión del sábado dará paso a un descanso de día y medio (volverán el lunes) tras una semana de dobles sesiones, reconocimientos médicos y toma de contacto, principalmente. Lo táctico irá llegando pero para ello Sergio debería contar pronto con los máximos efectivos posibles “reales” con los que contará durante la temporada.
Se espera pronto que uno de ellos sea Joseba Zaldua tras las palabras del presidente de la Real Sociedad en la que reconoce la salida del lateral derecho y su “acuerdo con el Cádiz CF”. Por tanto se convertirá en la tercera incorporación de la temporada amarilla.
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