El miedo a ganar y el VAR dejan al Cádiz sin tres puntos muy valiosos

Muchos se acordarán de este partido y de la segunda mitad realizada por un Cádiz que terminó matando y murió defendiendo, ahogándose en una segunda parte infame que volvió a contrastar con una primera mitad casi perfecta. El empate del Elche no fue injusto teniendo en cuenta que lo buscaron y encontraron a un Cádiz más preocupado de defender que de atacar.

No era de extrañar que Sergio González repitiese el mismo once que realizó una de las mejores actuaciones de la temporada en Mestalla. Repetir los mismos once futbolistas mandaba un mensaje claro de reconocimiento, pese a tener enfrente a un equipo que iba a intentar dificultar mucho las cosas con tres centrales y dos carrileros. Pero este Cádiz salió dejando claro que el que iba a complicar las cosas eran ellos.

Apenas seis minutos de partido y Brian Ocampo había dejado su huella con un zapatazo tremendo que se coló en la escuadra ante la impasividad de la defensa ilicitana. El uruguayo es, sin duda, el mejor fichaje de este mercado de invierno, demostrando que la inversión fue vital y necesaria y que su tiempo de adaptación ha pasado y su rol en el equipo es de titular y fundamental.

Con el gol a favor los cadistas se dedicaron a hacer lo que más les gusta, defender y contraatacar a un equipo, el Elche, que es una sombra de lo que fue la temporada pasada, intentando atacar con cierto pundonor pero casi sin corazón y, mucho menos, con cabeza. El equipo de Sergio tenía parte de culpa de que el Elche no fuese capaz de reaccionar, presionando fuerte arriba, siendo ambicioso y, sin generar mucho peligro.

El problema de los centrales

Cuando mejor estaban las cosas, tras un disparo tremendo de Iza al palo, Fali cayó lesionado, dejando claro que el equipo necesita refuerzos en esa parcela. El regreso de Momo y su puesta en escena se tuvo que producir en apenas media hora porque el central catalán dijo adiós prematuramente y habrá que ver para cuánto tiempo. Pudo ser el minuto aún más fatídico porque apenas en la reanudación, con Fali todavía fuera del terreno de juego, el Elche puso a prueba a Ledesma y golpeó en la misma jugada dos veces el mismo palo: Increíble.

Y ahí casi murió el Cádiz hasta el descanso, al menos el ofensivo porque se vio presionado por un Elche con ganas de agradar y de empatar el choque, haciendo mejores las cosas y aprovechándose de un Cádiz que se tomaba un respiro merecido tras una primera parte en la que brilló sobremanera. Pero la última de la primera parte demostró por qué los dos porteros que jugaban son los mejores de la categoría (los que más paran): Una falta rechazada por la barrera le cayó a Álex que se encontró con un paradón de Edgar Badía.

Una segunda parte, otra vez, distinta

Tras el descanso eran muchos los que pensaban si ocurriría lo mismo que ante el Almería o si el equipo se parecería al de Mestalla donde aguantó estoico hasta el final. El Elche cambió cosas, no el sistema, con recambios que surtieron efecto al principio. El Cádiz seguía a lo suyo, defendiendo bien pero sin ocasiones arriba y cada vez más se hundía en su área, en un bloque bajo que no auguraba nada positivo.

Con el paso de los minutos el Elche iba con una marcha más, sumando acercamientos al área de Conan Ledesma pero sin demasiado éxito, lo mismo que los amarillos que eran incapaces de generar una ocasión de peligro, ni con la posesión ni con los escasos contraataques que permitían los franjiverdes.

Pero si alguien avisaba era el Elche, a balón parado un remate de Diego González lo detuvo Ledesma sin problemas. Y en esa tesitura andaba el Cádiz, entre defender sin atacar y arriesgarse a perder la victoria o ir a por el partido.

La situación siguió hasta el final con un Cádiz sin apenas sufrir pero que las veía venir y que mostró un temor innecesario a aumentar la ventaja, confiando en su trabajo defensivo. Y si no matas, no atacas durante 60 minutos, lo que le das es alas al rival; Y ahí el Elche encontró el justo premio con un balón al corazón del área rematado por Ponce cuando apenas le quedaban diez minutos al partido para acabar. Un gol que no debió subir al marcador porque venía precedido por un fuera de juego que nadie vio.

Los últimos cinco minutos del partido tuvieron la reacción de un Cádiz que tuvo dos ocasiones de Negredo que se marcharon fuera por poco y que demostraron que, de ver sido más ambiciosos, la cosa podría haber sido muy distante.

Ficha técnica:

Cádiz CF: Ledesma, Iza (Momo 33′), Fali, Luis Hernández, Espino; Alcaraz, San Emeterio (Doarr

a 76), Álex (Arzamendia 77′), Ocampo (Alejo 61′), Sobrino, Choco (Negredo 77′)

Elche CF: Badía, Palacios, Roco, González, Carmona, Mascarell, Gumbau, Clerc (Fidel 46′), Milla (Blanco 46′), Martí (Ponce 72′), Boyé.

Árbitro: Del Cerro Grande (comité madrileño) que amonestó a Diego González, Palacios, San Emeterio,

Goles: