El líder fue demasiado para un Cádiz CF que aguantó 44 minutos vivo y con un buen plan que se vino abajo en minuto y medio, antes del descanso, cuando la desconexión grupal desencadenó un vendaval blaugrana que se aprovechó de la permisibilidad cadista que mutó de un bloque serio en un carrusel de facilidades individuales a los atacantes culés. Para muestra un botón: En el primer gol, Ferrán Torres se va de Arzamendia, Alcaraz y Fali en dos metros de terreno.
La plaza donde le tocaba lidiar al Cádiz no era nada más y nada menos que la de un líder presionado por la victoria del Real Madrid y en mitad de una eliminatoria de altura ante el Manchester United. Y para la ocasión, la única variación en el once fue el regreso de Álex en lugar de un Sergi Guardiola, ausente en la convocatoria, amén de la baja por sanción de Pacha Espino, suplida por Arzamendia. Con esos ingredientes y con un Barcelona sin Pedri y alguna novedad en el once, los cadistas aterrizaban sin miedo pero sabiendo de la importancia de todos y cada uno de los puntos en juego a estas alturas.
El guión de la película fue por donde se esperaba, con los de Xavi manejando la posesión en su totalidad y un Cádiz en bloque bajo buscando contras con las que hacer daño. Poco se pudo acercar en los primeros compases, salvo en un disparo de Bongonda que despejó Christensen. Los primeros minutos el partido estaba controlado por el Barcelona pero en ningún momento hacía sufrir en exceso al equipo amarillo.
Un bloque defensivo de altura hasta el minuto 44
Sergio González había declarado que no querían o debían ser descarados pero sí atrevidos y ahí llego el primer susto azulgrana, con un tanto anulado (bien anulado) a Roger Martí que marcó la hoja de ruta que el equipo estaba dispuesta a seguir.
Los intentos de uno y de otro lado se encontraban siempre con los cancerberos, protagonistas con disparos lejanos que apenas encontraban los delanteros. Una muestra sencilla de que el FC Barcelona no encontraba el camino correcto para hacer daño a un Cádiz cuyo principal peligro llegaba con errores propios en la salida de balón como sucedió hasta en un par de ocasiones con Brian Ocampo, con demasiados adornos en zonas prohibidas para ello.
Fue otra pérdida, en este caso, de Roger, la que creó la ocasión más clara, un remate de cabeza de Lewandovski que salvó Iza, atento al remate del polaco. Las precipitaciones y los regalos eran lo único que mantenían vivo al FC Barcelona que encontró premio en una mala salida a la presión de Iza y cuya jugada posterior acabó con el remate de Sergi Roberto a puerta vacía, tras una gran jugada de Ferrán Torres que se deshizo -otra vez- con facilidad de Arzamendia para poner un balón de oro a dos minutos del descanso.
La segunda parte poco o nada tuvo que ver con la primera mitad. Con el resultado ya finiquitado y el Cádiz en tierra de nadie, el escenario se presentaba peligroso.
Lo de las desconexiones temporales es algo habitual, por desgracia, en este equipo. Es difícil de explicar cómo llega haciendo un gran trabajo defensivo al minuto 44 y se marcha al descanso (con un minuto de añadido) con un 2-0 en contra.
Lo del Cádiz hasta ese momento había sido todo bueno pero en apenas un minuto y medio echó por la borda todo el trabajo.
Sin acierto de cara a portería
La segunda parte presentó un escenario distinto, con un Cádiz necesitado y más libre en ataque pero con la retaguardia vigilada porque si hay algo que el Barcelona quiere son espacios. Se los dieron los de Sergio, valientes pero contenidos, al menos en los primeros compases. Y ahí llegó la polémica ya la falta de Fali en un salto que acabó con un golazo de Roger (segundo que le anulaban en el partido). Cierto es que en la salida del córner, hay contacto entre Fali y Ter Stegen, al borde de la frontal del área pequeña, pero también que la decisión arbitral podía haber ido por otro lado. La regla de “no se puede tocar al portero” en el área pequeña se llevó a rajatabla.
De la segunda parte, sin duda, lo mejor fue la aparición de Chris Ramos, la joven apuesta del Cádiz en este mercado de invierno que a punto estuvo de marcar el gol de la jornada pero Ter Stegen lo evitó. Hay delantero para rato. Lo de Choco mandando el balón al palo en el tramo final no fue más que la certificación del buen partido del Cádiz que perdió en dos minutos negros pero que se marcó un buen partido en casa del líder.
La imagen del Cádiz fue la que se esperaba, dio la cara y tuvo sus ocasiones pero fue demasiado frágil en defensa, permitiendo al líder ser más líder y mirando al futuro más inmediato con otro partido clave en el Nuevo Mirandilla ante el Rayo Vallecano.
Ficha técnica:
FC Barcelona: Ter Steagen, Koundé, Christensen, Eric García, Balde; De Jong (Kessie 68′), Gavi, Sergi Roberto; Ferrán, Ansu Fati (Alarcón 85′), Lewandovski (Raphinha 74′).
Cádiz CF: Ledesma, Iza, Fali, Luis Hernández, Arzamendia; Escalante (Alejo 61′), Alcaraz (San Emeterio 68′), Bongonda (Sobrino 61′), Ocampo (Choco 61′); Álex, Roger (Chris Ramos 73′).
Árbitro: González Fuertes (comité asturiano) que amonestó a Roger, Rubén Alcaraz, De Jong, San Emeterio.
Goles: 1-0 Sergi Roberto (44′); 2-0 Lewandovski (46′)
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