Al Cádiz no se le suele dar nada bien enfrentarse al actual finalista de la Copa del Rey. El CA Osasuna es una de las bestias negras del Cádiz al que le tiene cogida la medida desde que se tienen registros entre ambos en Primera División, año 1989. En todos estos años, en concreto 34 años, solo hay una victoria amarilla, además reciente, del pasado año 2017.
Los enfrentamientos recientes recogen que Osasuna le tiene cogida, y mucho, la medida al Cádiz. Sendos 2-0 en los últimos enfrentamientos y una victoria el año pasado (2-3) para los rojillos y 3-2 en El Sadar, marcan la hegemonía de los navarros frente a los andaluces. Tanto es así que la única victoria del Cádiz en todos estos años se produjo en Copa del Rey el pasado 20 de septiembre de 2017.
Registros para echarse a temblar
Mirar todos los registros previos es ponerse a temblar puesto que en 19 enfrentamientos en Primera y Segunda el Cádiz solo ha logrado siete empates y 13 derrotas en un bagaje tremendamente negativo con el que pretenderán acabar este martes.
Sergio González no podrá contar con Fali ni tampoco con Jorge Mere, por lo que los problemas en defensa no ayudan a poder vencer a los rojillos que llegan realizando un buen juego y como flamantes finalistas de la Copa del Rey. El técnico tendrá que apostar por Víctor Chust seguramente y no parece que vaya a realizar demasiados cambios con respecto al pasado viernes.
Habrá que ver qué sucede pero la parroquia cadista no tiene buenos recuerdos de sus enfrentamientos con un equipo rival que es un fijo de Primera y que ha ganado los últimos ocho encuentros que ha visitado el Nuevo Mirandilla, anteriormente Ramón de Carranza. Solo el 19 de abril de 1992 pudo el Cádiz puntuar como local con un 2-2 y un 1-1 en El Sadar a la temporada siguiente.
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