Un empate que sabe casi a derrota cuando en los últimos tres minutos del descuento pierdes dos puntos y a un jugador por roja directa la semana que viene. El Cádiz no supo ganar lo que tenía ganado y ante diez jugadores porque pudo ser valiente cuando no lo fue y porque perdonó, sobre todo en la primera parte, las ocasiones más claras del partido. Empate con sabor a derrota en un buen partido amarillo.
En un vestuario hay ciertos códigos, varios status que no se deben romper a la primera de cambio y teniendo en cuenta este punto era difícil que un ex jugador como Sergio Gonzaléz diera entrada de inicio a Maxi Gómez. Y no fue así, solo hubo un cambio, el regreso de Escalante tras su sanción y la última incorporación se quedó en el banquillo viendo a la pareja Roger-Chris Ramos que estaba llamada a hacer grandes cosas, ganándose el premio que no tuvieron ante el conjunto culé.
Enfrente el Almería un rival, a priori, por la permanencia y un equipo que no iba a poner las cosas nada fáciles. Pero el partido, otra vez en casa, se presentaba como otra final más aunque aún estemos en el mes de agosto. Y cuando decíamos que la pareja de delanteros estaba llamada a hacer grandes cosas nos referíamos a que lo hacen todo bien, conectan perfectamente pero en la definición ninguno de los dos está acertado. A los cinco de partido Roger tuvo una ocasión clarísima que envió fuera tras una buena contra y una perfecta asistencia de Chris: la primera se fue al limbo.
Demasiadas ocasiones perdonadas
El Cádiz dominó todo el inicio del partido, sin sufrir apenas atrás y con una buena presión en línea de tres cuartos, haciendo las cosas complicadas a un Almería que buscaba atacar por los costados y aprovechar algún fallo defensivo amarillo. Pero fue Roger quien volvió a avisar con una volea dentro del área cazando un balón si peligro; estuvo a punto de convertir la más difícl, habiendo fallado la más sencilla.
La primera parte acabó como empezó, con mucho énfasis, algunas ocasiones, un buen Cádiz que no terminó de acertar con la portería rival.
Para acertar con la portería del Maximiano tuvieron que pasar varias cosas en la segunda parte; La primera de ellas es que el colegiado expulsó a Edgar por doble amarilla y eso permitió a los de Sergio seguir ganando metros en el terreno de juego, presionando y llegando no sin demasiado acierto y la segunda fue sacar provecho, otra vez, de una jugada a balón parado, el gran debe de la temporada pasada. Pero en ésta Sergio y los suyos han hecho los deberes y volvieron a marcar, esta vez Luis Hernández que culminó una falta frontal que acabó con un gran tanto para el central.
El partido no se volvió loco, ni mucho menos. Maxi entró por Chris y Sobrino por Darwin pero el encuentro siguió en una calma permanente con algún centro lateral desde la derecha de Iván Alejo y casi siempre un control defectuoso de Roger Martí que las caza todas pero necesita un gol para recuperar la confianza -al parecer- perdida.
Falta de valentía tras el tanto
Arriesgó poco o nada el conjunto de Sergio ante la impasividad almeriense que en ningún caso encontró la forma de ser una verdadera amenaza real para Ledesma hasta el final. El Cádiz perdió tiempo una y otra vez, se olvidó de atacar y se hundió cada vez más atrás. El colegiado no vio o no quiso ver un posible agarrón a Koné y ahí parecia que el partido se diluía pero en medio de pérdidas de tiempo innecesarias, una jugada aislada terminó en el tanto del gol del Almería.
Dijo Luis Hernández que se perdían dos puntos en una jugada aislada y que al equipo le habia faltado “valentía” para ir a por el segundo. Con lo dicho por él, poco más se puede añadir a un partido en el que el Cádiz mereció más pero falló cuando lo tenía todo de cara.
Ficha Técnica:
Cádiz CF: Ledesma, Iza, Fali, Luis Hernández, Javi Hernández; Alcaraz (San Emeterio 89′), Escalante, Darwin (Sobrino 69′), Alejo (Pires 84′); Chris Ramos (Maxi Gómez 69′), Roger Martí (Álex 89′).
UD Almería: Maximiano, Marc Pubill, Chumi, Edgard, Akieme; Baba, Dion (Koné 73′), Arribas (Kaiky 51′), Embarba (Robertone 73′), Arnau Puigmal (Ramazani 46′), Luis Suárez (Baptistao 89′).
Árbitro: García Verdura (comité catalán) que amonestó a Puigmal, Edgard (doble amarilla, acabó expulsado), Luis Suárez, Ramazani y expulsó a San Emeterio.
Goles: 1-0 Luis Hernández (59′), 1-1 Kaiky (93′)
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