Habrá quien culpe al planteamiento, otros a la idea de juego y otras personas, quizás, a la lluvia, los jugadores o al señor que pasaba por la puerta de El Sadar vendiendo las miles de bufandas que había en la grada. Culpar de la derrota, evidentemente. Pero lo que está claro es que Osasuna fue superior, que mereció la victoria y mostraron que la salvación pasa por su casa, algo que bien podría aplicárselo el Cádiz que aún no ha ganado ante su afición.
Porque es difícil ganar un partido si no se ataca. El Cádiz en ningún momento fue un equipo aguerrido, nunca supo cómo atacar y en ningún momento estuvo cerca de poner en peligro ni hacer dudar, lo más mínimo, a la parroquia rojilla que vio ganar a su equipo diez jornadas después. Y no lo puede hacer si el planteamiento es defender y defender y tampoco con jugadores que, ofensivamente, no han aportado nada hasta hoy. Ni Alejo, ni Rubén Sobrino -la insistencia de Cervera ya tiene poco sustento-, ni el resto aportaron nada en ataque. Quizás un poco más el “desahuciado” Andone, el único que planteó ciertas cosas, sin éxito alguno.
Nunca fue rival ante Osasuna
El Cádiz se empeñó, otra vez, en dar vida a un rival directo al que podía haber metido en la pelea. Y lo hizo sin apenas plantar cara, ni en la primera parte, ni tampoco en la segunda que estuvo a su disposición para, al menos, poner en apuros a Herrera, casi inédito, salvo un cabezazo de Florín Andone desde el punto de penalti.
La situación es preocupante y en el encuentro se volvió a ver que no hay visos de mejora, otra vez. Con errores de concentración, falta de despejes, de intensidad, quizás y lejos de ideas constructivas que hagan creer en el milagro de la salvación.
Ficha técnica:
CA Osasuna: Herrera, Cote, Cruz, David García, Vidal, Torró, Moncayola, Barja, García, Budimir, Kike García.
Cádiz CF: Ledesma, Fali, Chust, Cala, Espino, Alarcón, Jonsson, Arzarmendia, Chapela, Álex Fernández, Sobrino.
Árbitro: De Burgos Bengoetxea (comité vasco) que amonestó a Arzamendia y Andone por parte del Cádiz y Juan Cruz y Lucas Torró en Osasuna.
Goles: 1-0 Budimir (38′); 2-0 Kike Barja (48′)
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