La Guardia Civil y la Policía Nacional han desarticulado un grupo criminal asentado en Chiclana de la Frontera, especializado en la distribución de drogas al menudeo mediante el sistema de “tele-droga”. La operación, bautizada como “Cocotero-Palmera”, se ha saldado con cuatro personas detenidas, entre ellas el líder del grupo y su pareja, quienes utilizaban a sus hijos menores para encubrir sus movimientos.
El dispositivo culminó el pasado 3 de junio con tres registros simultáneos en domicilios de la localidad gaditana. Los agentes incautaron cocaína, heroína y “rebujo” (una mezcla de ambas), además de sustancias de corte, balanzas de precisión, teléfonos móviles, y una gran cantidad de billetes fraccionados. También se localizaron armas de fuego ilegales, incluyendo una escopeta recortada, un revólver y varias armas detonadoras con munición real.
El grupo operaba desde varias viviendas, cada una con una función específica: almacenaje, preparación de dosis y punto de venta. Las fuerzas de seguridad detectaron también transacciones en la vía pública, concertadas previamente por teléfono. En algunos casos, los investigados acudían acompañados de menores para evitar levantar sospechas.
Las pesquisas se iniciaron tres meses antes, a partir de indicios obtenidos por el Área de Investigación de la Guardia Civil de Chiclana y el Grupo de Estupefacientes de la Policía Nacional de San Fernando. Durante el seguimiento, se interceptaron numerosos compradores, algunos de los cuales pagaban con joyas de oro de procedencia dudosa.
Tras su puesta a disposición judicial, el Juzgado de Instrucción nº 1 de Chiclana decretó prisión provisional para los dos cabecillas del grupo criminal y libertad con cargos para los otros dos detenidos.
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