Sin actitud no hay paraíso: derrota del Cádiz CF en Tenerife

Malísima primera mitad e incompleta segunda parte. Ese sería el resumen de la actuación del Cádiz CF en el Heliodoro Rodríguez López, que finalizó con una derrota amarilla que impide ese asalto a la zona alta de la tabla. Gaizka Garitano optó por colocar a Iker Recio en el eje de la zaga para sustituir a Bojan Kovacevic, mientras que también sorprendió situando a Matos como extremo y dejando en el banquillo a Óscar Melendo. Por lo demás, sin modificaciones en un once que volvía a presentar a Joseba Zaldua en el lateral derecho.

A pesar de la oportunidad de oro que tenía el Cádiz CF, el equipo amarillo hizo una primera parte lamentable. Falto de intensidad y con concentración nula, el Tenerife fue infinitamente superior al cuadro de Gaizka Garitano. Comenzaba avisando en el minuto 2, cuando Yann Bodiger estrellaba en el palo un disparo lejano que sorprendía a David Gil.

Incomparecencia en la primera mitad

Toque de atención que los amarillos no recogieron, continuando a merced del conjunto de Álvaro Cervera, que detectó que era por las bandas y a través de los desdoblamientos de los laterales por donde podía hacer daño al entramado defensivo cadista. Fue en el minuto 25 cuando llegaba el tanto del CD Tenerife. Una falta perfectamente servida por Luismi Cruz era introducida involuntariamente por Rubén Alcaraz en la portería de David Gil. La crónica de una diana anunciada por lo que estaban mostrando uno y otro equipo. Desde entonces, el cuadro blanquiazul dio algún paso hacia atrás, y el Cádiz CF trató de amenazar la portería de Edgar Badía sin premio, llegando al descanso con desventaja en el marcador.

La reacción amarilla fue sofocada por Enric Gallego

Todo cambió en el segundo tiempo. Gaizka Garitano movió ficha y dio entrada a Óscar Melendo y Carlos Fernández en sustitución de Matos y Rubén Sobrino. Un movimiento acertado, ya que el Cádiz comenzó a crear peligro. Mario Climent estuvo cerca de anotar con un disparo que se fue por muy poco, y en el minuto 67 Carlos Fernández erró una ocasión clarísima cuando solo tenía que empujar la pelota. Dos minutos después, el sevillano dejaría solo a Chris Ramos que mandó arriba el mano a mano ante Édgar Badía.

El empate amarillo llegaría desde los once metros. Ontiveros se fabricó una jugada espectacular y fue derribado por Aitor Sanz dentro del área. Álex Fernández, especialista, no fallaba y ponía la igualada para hacer soñar al Cádiz CF con la remontada. Nada más lejos de la realidad, porque a Mario Climent le volvieron a pillar la espalda y Aarón puso un caramelito que Enric Gallego no perdonó para dejar los tres puntos en Tenerife.

Eso sí, antes del pitido final tuvo una triple ocasión muy clara el Cádiz CF. La primera, un disparo de Alcaraz que repelía Édgar Badía. La segunda, un centro chut de Climent que se estrelló en el larguero e, inmediatamente después, Melendo se volvía a encontrar con el guardameta. Una derrota injusta, ya que hubo un tiempo para cada equipo, pero que pone de manifiesto que sin actitud y sin intensidad no se va a ningún lado en esta categoría.