
Con la tradicional frase en latín “Extra Omnes”, se cerraron este miércoles las puertas de la Capilla Sixtina, dando inicio oficial al Cónclave donde los 133 cardenales electores buscarán elegir al sucesor del Papa emérito. Tras una meditación a cargo del padre Raniero Cantalamessa, comenzó el complejo proceso de organización: se repartieron las papeletas, se sortearon los encargados del escrutinio y se realizó una primera votación.
Mientras tanto, en la Plaza de San Pedro, más de 45.000 personas seguían el acontecimiento con la mirada fija en la famosa chimenea. Las gaviotas, posadas con total naturalidad sobre el tejado, robaban de vez en cuando las miradas del público. En la plaza se respiraba un ambiente de espera y esperanza, animado por cánticos, aplausos y especulaciones sobre el resultado de la votación.
Pasadas las 21:00, finalmente se disiparon las dudas: el humo negro que salió de la chimenea confirmó que no hubo acuerdo. Por ahora, no hay nuevo Papa. El rugido de la multitud reflejó tanto la emoción como la impaciencia de quienes esperaban una señal blanca. La elección del 267º Pontífice aún no se ha concretado.
Nueva ronda de votaciones
La jornada del jueves 8 de mayo continuará con una nueva ronda de votaciones. Los cardenales comenzarán el día con misa y oración, antes de regresar a la Capilla Sixtina. Se prevén dos sesiones de votación, una por la mañana y otra por la tarde, con sus respectivas señales de humo. El mundo seguirá pendiente del cielo vaticano, a la espera del tan esperado Habemus Papam.
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