Otra derrota más y la crisis continúa. El Cádiz fue incapaz de ganar en Éibar y cayó derrotado, por la mínima, en un encuentro en el que las ocasiones brillaron por su ausencia en los dos bandos pero, especialmente, en un equipo amarillo que no disparó entre los tres palos en toda la segunda parte. La sensación de nerviosismo sigue presente en un equipo metido en muchos problemas y que no parece encontrar soluciones pese a los intentos por lograrlo.
Revolucionó el once Paco López, consciente de la dificultad de la semana y también de la necesidad de dar un giro al estado de unos jugadores que no merecen estar donde está. Lo más llamativo, la vuelta de Caro a la portería, la titularidad de De la Rosa y el debut de Glauder como lateral izquierdo y Kovacevic en el eje de la zaga. Con Ontiveros y Ocampo en el banquillo, todo apuntaba a un duelo de necesitados pero con un Cádiz enrabietado por los últimos resultados.
Salieron bien los amarillos que en el primer minuto tuvieron la primera ocasión con un despeje a tiro de Escalante, muy peligroso. A los cinco una falta botada por Alejo terminó con un flojo cabezazo de San Emeterio que atrapó Fruzato. La intensidad y el descaro del Cádiz eran evidentes, como siempre a estas altura de partido. La presión y el hambre eran una evidencia total, encerrando al Éibar en su campo.
Otra vez por detrás en el marcador
El partido tuvo todo el ritmo del mundo desde el inicio. El equipo armero reaccionó y se quitó la presión de encima, atacando y encontrando espacios; Glauder salvó el tanto local sobre la línea a los 7 minutos. El partido entró en un ida y vuelta pero fue el Éibar quien golpeó primero con un gol de Corpas ante el que pudo hacer algo más Caro, que no tuvo fortuna y el balón se coló entre sus piernas.
Una vez más el Cádiz comenzaba por detrás en el marcador cuando merecía algo más. La primera parte fue un calco de partidos anteriores, un Cádiz dominador, agresivo pero sin eficacia y sin calidad suficiente arriba para hacer daño real. El Éibar, con poco, iba por delante y ponía contra las cuerdas el planteamiento y la revolución de Paco López.
Una segunda parte insulsa, sin reacción amarilla
La segunda mitad no arrancó de manera distinta. Los nervios, la falta de confianza, hicieron mella en un Cádiz inseguro que no supo contrarestar los ataques armeros que buscaron con ahínco el segundo tanto pero siempre lejos de la portería de Caro, más seguro en algunas intervenciones que en la del tanto local.
A este Cádiz todo se le vuelve en contra y tiene infinidad de problemas a la hora de reponerse de un golpe en contra. Nada más comenzar la segunda parte pudo cambiar el signo del partido en una acción que el Cádiz reclamó con agresión pero la patada de Puertas a Alejo solo acabó en amarilla; ni se revisó la jugada.
Ni un solo tiro entre los tres palos
Pronto movió el banquillo Paco López, dando entrada al mismo tiempo a Ocampo, Ontiveros y Carlos Fernández, tratando de agitar un partido que había entrado en punto muerto. Reclamó un penalti el Cádiz por un pisotón sobre Carlos Fernández nada más entrar pero la jugada parecía ser involuntaria y fortuita.
El Cádiz no mejoró en ataque. Es cierto que no sufrió tampoco pero poco pudo hacer ante un ordenador Éibar que supo defender la renta sin tener que perder tiempo como hizo el Racing de Santander hace siete días pero con la misma efectividad. El Cádiz no fue capaz de tirar entre los tres palos en la segunda parte, fue incapaz de encontrar portería por las bandas, ni tampoco por el centro de un equipo que se defendió con once jugadores en la frontal de su área.
La derrota pudo ser mayor en el tramo final pero perdonó Pascual al filo del noventa. Con estos ingredientes, todo parece dirigido a otra final el sábado ante el Oviedo en el Nuevo Mirandilla, un escenario siempre complicado para un Cádiz que ya tampoco saber ganar fuera de casa y al que se le están complicando las cosas en exceso.
Ficha técnica:
SD Éibar: Fruzato, Corpas, Carrillo, Chema, Arrilaga; Mateus, Sergio; Toni Villa (Alkain 68′), Puertas (Pascual 55′), Merquelanz (Maderiaga 70′), Bautista (Peru Nolaskoain 80′).
Cádiz CF: Caro, Zaldúa, Kovacevic, Chust, Glauder; Escalante, San Emeterio (Kouamé 68′), Sobrino (76′ Melendo), De la Rosa (Carlos Fernández 56′), Alejo (Ontiveros 57′), Chris Ramos (Ocampo 57′).
Árbitro: Lax Franco Salvador (comité murciano) que amonestó a De la Rosa, Carrillo, Alejo, Puertas, Fali (fuera del campo), Ontiveros, Toni Villa, Zaldúa, Chema, Kouamé.
Goles: 1-0 Corpas, 31min;
Más historias
Jura de bandera de la 88 Promoción en la Escuela de Suboficiales de la Armada en San Fernando
Policías de la provincia de Cádiz trabajarán para que ningún niño de Benetússer se quede sin juguete
Fede ya piensa en el Deportivo: “Hay que ganar sí o sí”