Propósitos saludables del Año Nuevo. El físico no lo es todo, ¿y la salud mental en pandemia?

Cerca del  50 por ciento de los españoles declara en estas fechas, tener buenos propósitos de Año Nuevo. La mayoría de ellos son metas relacionadas con la vida saludable y la salida para empezar la carrera es el año que comienza. Siempre se empieza con motivación y energía pero como tónica general el ochenta por ciento se queda en puras ilusiones.

Además de los siempre recurrentes como hacer ejercicio, dejar de fumar o aprender algún idioma, la pandemia está poniendo sobre la mesa algunos de los problemas que ya estaban allí pero que ahora nos afectan de manera más acuciante, y que debemos solucionar y valorar en este 2022.

Agotamiento ante la pandemia

Hace algún tiempo que nuestra vida se ha visto muy limitada. Una situación que genera estados de inseguridad, miedo y frustración. Pero teniendo en cuenta lo que una solución se está dilatando en el tiempo,  este miedo parece haberse convertido en agotamiento y desánimo. Los planes de vida y el estilo de vida no se pueden llevar a cabo y llega el enfado y la frustración.

El hecho de que la pandemia se alargue hace también que nuestra salud mental se vea afectada. Esto se puede manifestar con un conjunto de síntomas de los que hay que estar atentos.  Alteración del sueño y el apetito, pensamientos negativos recurrentes, sentimientos de tristeza, falta de motivación, irritabilidad y problemas de concentración.

Y en estos casos se necesita la ayuda de un profesional, además de familiares y amigos. Ser firmes y mantener una buena rutina de sueño y de alimentación junto con realizar ejercicio físico de forma habitual  o terapias de relajación son otras opciones. Conseguir ayudar y animar a que se normalice cada vez más acudir a un profesional de la salud mental es fundamental en estos momentos.

Mens sana in corpore sano, ¿y los niños?

Es algo que parece evidente pero que a veces olvidamos. Conocer cómo somos y cómo funciona nuestra mente nos ayudará en avanzar en todos los aspectos de nuestra vida. Pero en este año 2021 y potenciado por la situación sanitaria que estamos viviendo hay algunos puntos alarmantes.

Los niños, niñas y adolescentes con problemas de salud mental en el último año se han disparado. Y a ello se suma el preocupante problema de la falta de recursos para atenderlos a todos a tiempo.

Una reciente encuesta realizada por la organización de infancia, Save de Children, una de las primeras en centrarse en la atención de menores, ha puesto de manifiesto que la situación sanitaria y social actual ha generado nuevos miedos, preocupaciones e infelicidad en las niñas y niños de 4 a 14 años.

Según los datos que se han basado en las respuestas de sus padres (2.000 progenitores), los trastornos como ansiedad y depresión son cuatro veces mayores que los que la última Encuesta Nacional de Salud hizo públicos en el año 2017.

Según el informe Crecer Saludable(mente), un análisis sobre la salud mental y el suicidio en la infancia y la adolescencia presentado este mes, los problemas socioeconómicos aumentan claramente el riesgo de sufrir trastornos en la salud mental. En este caso, supone el triple en familias de renta baja. Aunque son datos que deben tomarse con precaución dado que son ideas no compartid